Diferencias entre lana de roca y lana mineral

lana de roca

El tipo de aislamiento que elijas podría ser más eficiente si lo seleccionas correctamente. Por eso, considerar el tipo de lana que vas a usar al aislar tu edificación es realmente importante.

Como empresa experta en aislamientos, podemos decirte cuáles son las diferencias entre lana de roca y lana mineral. De esta forma, podrás seleccionar la más idónea para tu tipo de superficie, estructura o edificio.

Los principales factores que generan diferencias entre lana de roca y lana mineral son su conductividad, resistencia, precio y comodidad. Aquí te diremos cuál es mejor en cada caso, de manera que puedas tomar una decisión mejor informada.

Lana de roca y lana mineral. ¿Cuál escoger?

Lo primero que debes saber es que, al seleccionar un producto aislante hecho de lana, siempre se trata de un material netamente mineral.

No obstante, se hace una diferencia importante entre lana de roca y lana de vidrio (o lana mineral) para hacer referencia a la composición interior de cada una de las preparaciones. Esto genera una respuesta diferente ante el medio ambiente en el que se encuentra, así como la superficie en la cual se aplica.

Estas son algunas de las diferencias entre lana de roca y lana mineral que debes conocer para tomar una decisión acertada a la hora de elegir una:

Conductividad

La conductividad térmica hace referencia a la forma como el material se comporta frente a las altas temperaturas y si las conduce al interior de la superficie aislada. Ambos materiales tienen un índice de conducción térmica muy similar. El de la lana de roca es de 0,4 – 0,45 W/mK, mientras que el de la lana de vidrio está entre 0,32 y 0,38 W/mK.

Aunque la lana de vidrio es ligeramente superior a la de roca, ya que conduce menos el calor, la diferencia entre ambos es apenas perceptible. La selección basada en esta diferencia no es demasiado relevante.

En ambos casos, se trata de una gran resistencia térmica, aún frente a incendios. En cualquier caso, mejora de manera considerable la eficiencia energética de cualquier tipo de superficie.

Resistencia térmica

La lana de roca garantiza un tiempo increíble de vida útil frente a la exposición a los rayos UV. Por su parte, la lana de vidrio envejece un poco más rápido.

La lana de roca es capaz de soportar una temperatura externa muy alta con mayor eficiencia. La lana de vidrio ejerce un efecto reflexivo de la iluminación solar. Esto impide que la superficie se caliente, generando temperaturas incómodas en el interior.

No obstante, la lana de roca ha probado ser más eficiente gracias a que engrosa apropiadamente la superficie. Además, protege los materiales originales de los que está compuesta. De hecho, se utiliza 

también para aislar el interior de las propiedades, ya que ayuda a conservar el calor y evitar su pérdida gracias a su grosor y densidad.

Mientras, la lana de vidrio es más apropiada para el exterior.

Resistencia al fuego

Ambos materiales son ignífugos. Tienen una asombrosa resistencia a las llamas de fuego, temperaturas extremadamente altas e incluso son muy útiles frente a los incendios.

Ambos tienen una clasificación A1 en la resistencia contra el fuego, lo que es vital para mantener las estructuras protegidas en caso de incendios. Sin embargo, la lana de roca es más apropiada para ser usada en edificaciones que requieren protección pasiva contra el fuego.

Resistencia a la humedad

En este punto, la lana de roca se destaca con creces. En este caso, cuenta con propiedades hidrófugas y una baja densidad sin presencia de aire en el interior o porosidad, la cual puede llenarse de humedad. De esta forma, evita que surjan agentes bacterianos, moho y humedades en el futuro.

Por su parte, la lana de vidrio no cuenta con ninguna de estas propiedades. No ejerce una resistencia a la humedad válida y requiere que la superficie sea impermeabilizada posterior a su aislamiento.

Precio

De acuerdo con los estudios de mercado, la lana mineral es hasta un 10% más económica que la lana de roca. Pero, es necesario tener en cuenta los costes de instalación, así como los beneficios que se obtienen al realizar el aislamiento de la propiedad. Así se explica por qué el precio puede elevarse un poco en el segundo caso.

En cualquier caso, la lana de roca tiene una durabilidad superior y no requiere de la impermeabilización de la superficie. 

Justo lo contrario ocurre con la lana mineral, con la que deberás pagar un precio posterior por impermeabilizar la superficie. Solo así podrás aprovechar completamente sus propiedades y mantenerlas en buen estado por más tiempo.

Confort acústico

Como ya hemos dicho, el grosor que se genera a partir de la lana de roca es mayor. Esto hace posible que sea un mejor aislante acústico que la lana mineral. Cuando se aplica un mortero con lana de roca se consigue un excelente aislamiento gracias a la combinación de los elementos de la superficie junto a los del aislamiento.

En el caso de la lana de vidrio, es un material mucho más delgado, conformado por hebras de vidrio en combinación con los demás componentes. Por esta razón, no están diseñados para generar una gran capa robusta, sino que centran sus esfuerzos en proteger la superficie de agentes térmicos.

Conocer las diferencias entre lana de roca y lana mineral te ayudará a tomar una decisión más informada. Tan solo debes comparar con los objetivos y beneficios que quieres obtener al realizar la obra de aislamiento en tu propiedad.

De cualquier forma, en Igesur siempre recomendamos recibir la asesoría de un experto para garantizar la elección del mejor material.

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